domingo, 6 de enero de 2019

Detrás de la cabeza






1. Los hermanos 


Formas

En el interior
habitan otros
y sus memorias

y a veces
uno las sueña

alguna vez
es pesadilla
y el despertar
es el aire fresco
del alivio

algún escombro
del sueño que fue
queda en un rincón
de la vigilia

si decides interrogar
esos objetos
caes en la cuenta
de que ellos devinieron
objetos personales
al ser abandonados
por seres sin rostro
y entonces te preguntas
dónde estuviste
mientras tanta cosa
caía en el olvido.



2. Amores son amores


II


Adios al verano
se escapó
el calor
que persiste
en añoranza

no se alcanza a distinguir
la escala de las cosas
porque el tiempo
las empequeñece
a todas sin distinción

a simple vista
quedaron lejos
uno del otro

uno que lee
y el otro que no

uno que cree que
cuando no hay libro
que guarde el calor
que circula entre dos
el calor se pierde
otro que dice que
lo que sostiene el calor es
la presencia
lectura entre dos.



III


un sentido
de las cosas
está en la belleza
del momento

tus palabras oscilan en el aire
mientras un haz de luz
atraviesa los objetos
detenidos en la mesa

no es amor
hasta que no se entona
una confidencia


IV


empezar el día en otra lengua
así es el comienzo
y la vida entera
pura traducción
de lo inasible

traducir el mundo que duele
mundo de vigilia encarnado
en las últimas partículas del sueño

traducir porque nos hablan
siempre en otra lengua
sueño y vigilia
valijas que se hacen
valijas que se deshacen

inicio y amor
en otra lengua
sin soporte y sin destino.


VII


mi reserva natural
resto de palabras
que sedimentan
cuando se retira la marea
de la banalidad

residuo anclado
en la tierra

ciudad sin restricciones
vida hecha de pequeñas
cosas que se dan una sola vez

vemos con distracción
lo que no volverá

vivimos como amantes
dentro de nuestro propia obra
que va camino
a extraviarse.


3. Detrás de la cabeza



Detrás de la cabeza


La poesía es eso
que está
detrás de la cabeza

todo eso
que no entra
en el formato
cabeza

un gesto inconcluso
de tu padre
que murió hace tanto

una conversación anónima
que llega por azar
justo a tus oídos

el no saber si
te equivocaste
o no

hojas que mudan
estaciones que pasan

y una luz
que al encenderla
al atardecer
te da ganas
de llorar

en un tal vez nosotros

la inflexión de una voz
la palabra que abre
en la piel la herida

pasos que retumban
veloces en la vereda
es tal vez una fuga
o un urgencia
de quien se dirige
a un encuentro


vacilaciones
que anticipan
alguna decepción
o que ponen en duda
tanto arrebato

mirada incompleta
que nada abarca
en la noche
de los sentidos

no hay defensa
para lo que habita
detrás de la cabeza
tan sólo palabras

te sientas en un banco
que dibuja tu sombra
bajo el alumbrado
a riesgo de caer
ante el vértigo
de los cambios

los sentidos entran
en contradicción
y entonces buscas
en el flash
de la fotografía
restablecer
la primacía
de la imagen

no es para alarmarse
lo que no entra
en el formato
cabeza

volverá en la poesía.


Sara Cohen, Detrás de la cabeza, Ediciones Paradiso, Buenos Aires, 2018.

Obra visual: Manuel Valdés

martes, 1 de enero de 2019

Diario




15

Por un ojo-de-artificio es posible percibir la detención del tiempo. En el verano el tiempo se detiene —y se hace diáfano, y se abandona a la expansión de los cuerpos. Ellos están y no existen, borran la conciencia de sí, borran la idea —no es sólo eso placer, no es sólo su persistencia.
     ¿Qué es lo que coincide con la palabra?
     Este verano es una pared de espejos.


17.

    ¿Qué es lo que recomienza? La escritura, deambulando sobre deseos urdidos en escombros de otros deseos, ahora lejanos. Recomienzo la escritura —su placer anárquico, agradable, inflexible en su exigencia. Y al recomenzar me alejo del cumplimiento de esa construcción sobre el cuerpo, que se diluye en sus cortezas.

     Profusión de mínimas acciones, rayos —sin mansedumbre atacan, atraviesan son sus astas negras los aspectos aislados en los sentidos. Lo sensible refugia frutos salvajes (¿tal vez mezquinos?) de cada instante inmediato, o de la inmediatez de los instantes percibidos en medio de gestos, de acciones, no vacíos ni nimios -despojados incluso de lo caduco.


18.

    ¿Qué es lo que recomienzo? —la escritura, la escritura que pretende ser lectura, tamizar con los signos la espesura del mundo. Y el mundo siempre se configura para sus fines,  la contemplación sólo se desarrolla en analogías.
     La escritura como analogía —y no como expresión; construir otra naturaleza sin moral, sin biomas. Entonces eso: una experiencia de abstención y una construcción poética que exhiba su desarrollo como su símbolo, a la vez vacío de referente, vacío de explicaciones, aislado de ideas.


***


15.

    With an artificial eye, It´s possible to see the stopping of time. In summer, time stops, makes itself diaphanous, abandons itself to de expansion of bodies. They ara and they don´t exist, they erase de consciousness of themselves, they erase the idea —it´s not only that pleasure, it´s not only its persistence. 
     What coincides with the word?
     This summer is a wall of mirrors.


17.

    What is it that begins again? Writing, wandering among, warped desires in the ruins of other desires, distant now. I take up writing again —its anarchic, joy, pleasing an inflexible in its demands. And in starting anew I drift away from the completion of that structure above the body, which is dissolved in its shell.

    A profusion of minor actions, rays—without gentleness day attack, with their black horns they traverse the isolated aspects of the senses. The sensible shelters the savage (or maybe miserly?) fruits of each inmediate instants perceived amid gestures and actions, neither empty nor trivial—stripped even of the obsolete.


Liliana Ponce, Diario, Ediciones Señal, NY, 2018.
(traducción:  Michel Martin Shea)

Obra visual: Rufino Tamayo